Quiero empezar estas reflexiones citando a Fito Cabrales:
"Puedo
escribir y no disimular, es la ventaja de irse haciendo viejo. No tengo
nada para impresionar ni por fuera ni por dentro".
A
veces me preguntan como preparo la carrera, y no sé como explicarles
que una carrera asi no se puede preparar...desde mi punto de vista.
A
finales del 2007, y después de 10 años sin competir, decidí empezar a
entrenar nuevamente para correr una Media Maratón. Nunca había corrido
esa distancia, y lo decidí por leer a mi antiguo y actual entrenador
contando que no había podido terminar una carrera llamada
Spartathlon...por segunda vez! Busqué información y algo así como
electricidad pasó por todo mi cuerpo. Ahi me di cuenta que ese era mi
camino y mi primer paso fue en esa dirección. En ese momento sabía que
iba a ser largo y que no solo tendría que preparar mi cuerpo, mi cabeza
jugaría un papel fundamental...y no me equivoqué.
Desde
la primera Maratón hubo un cambio. En 4 meses de solo trotar, corri en
Madrid en menos de 3 horas 30 minutos...y si tenia alguna duda, ahi me
la saqué. Ya no había vuelta atrás.
"...La
noche en vela voy cruzando el mar, porque los sueños viajan con el
viento, y en mi ventana sopla en el cristal. Mira a ver si estoy
despierto".
Dos
años estuve desarrollando mi fondo y dureza. Pasaron varias Maratones y
Ultra Maratones y veía el Spartathlon cada vez más lejos. Pero un día y
después de un verano cuestionandome la continuidad de este camino, me
decidí. Si...una noche me decidí a estar en la salida del Spartathlon en
dos años, pero sabía que solo no lo iba a conseguir. Hablé con Patri y
se lo pregunté. Le conté lo que creia que este camino nos iba a llevar y
le pregunté si queria hacerlo. Sin dudarlo me dijo que si. Contacté
inmediatamente con mi entrenador y nos pusimos manos a la obra.
"...Lo que me llevará al final serán mis pasos, no el camino. ¿ No ves que siempre vas detrás
cuando persigues al destino? Siempre es la mano y no el puñal, nunca es lo que puede haber sido..."
Me
llevó un años más de lo que esperaba pero acá estamos. Solo 10 días de
estar en la salida, con los deberes bien hechos y con un pedazo de
equipo que no lo puedo creer. Cati, Patri, Pablo, Nacho, Raquel, Patri Sancho.
Personas que creen más en mi que yo mismo. No todos me podrán acompañar
pero seguro que van a estar conmigo. Como me dijeron hoy en el gimnasio:
-"Cuando te cueste correr sacá a algunos de nosotros de la mochila que
llevarás porque ahi estaremos".
"...No voy a sentirme mal si algo no me sale bien. He aprendido a derrapar y a chocar con la pared.
Que la vida se nos va, como el humo de ese tren, como un beso en un portal antes de que cuente diez".
De
corazón les digo que me siento totalmente preparado para acabarla,
Pablo me entrenó muy bien. Raquel hizo muchisimo con mi cabeza y mis
emociones. Si seré capaz de solucionar los lances de carrera seré capaz
de acabarla.
"...Dejé
de volar, me hundí en el barro y entre tanto barro me encontré. Algo de
calor, sin tus abrazos, ahora sé que nunca volveré (a ser el mismo)".
Entonces ¿cómo preparé el Spartathlon?
Lo
preparé dejando horas de sueño, invirtiendo dinero sabiendo que lo
recuperaríamos en emociones. Cambiamos nuestras vacaciones por carreras,
nuestras salidas nocturnas de sábados a trotes de domingos en
amaneceres. Nuestros zapatos por zapatillas, nuestra merienda por
barritas energéticas. Quedaron muchos amigos atrás pero cada uno me
sumaron pasos en el camino. Cambié mi mal humor por sonrisas, mi
tozudez, mi "no necesitar de nadie". Cambié mi "yo puedo hacer todo
solo" y conocí mis limitaciones. Aprendí a agradecer y a no esperar
gracias. Aprendí a dar un aliento y recibirlo en el peor momento.
Preparé el Spartathlon con dolor de pies, ampollas, dolores musculares.
Lo preparé siguiendo adelante cuando no podía más y abandonando cuando
creía que no podía más. Lo preparé debajo de mas de 30 grados de
temperatura, con el agua por los tobillos y el barro dentro de las
zapatillas. Cuando tuve sed paré y bebí, cuando tuve hambre comí. Si
quería mear, a veces paraba y meaba y otras veces meaba corriendo. Había
veces que tenia sueño pero seguía avanzando. Preparé el Spartathlon
entrenando más de lo que alguna vez pensé entrenar.
Preparé el Spartathlon cambiando mi vida.